Los perros necesitan tener una
piel y un pelaje sanos para proteger su organismo de elementos como el frío, el
calor y las bacterias. Tener una piel sana es sinónimo de buena salud y para
conseguirlo es fundamental que el perro realice una correcta alimentación.
Cuando el perro no ingiere todos
los alimentos que su organismo necesita esto se refleja en el color, la textura
y el aspecto de su epidermis. Los animales que se alimentan con piensos de
calidad y de forma equilibrada tienen una piel y un pelaje sanos. Los
suplementos de ácidos grasos omega 3 y omega 6 que contienen los piensos
caninos ayudan a mantener la piel flexible e hidratada.
Existen piensos de primera
calidad con todas las vitaminas y nutrientes necesarios para que el perro goce
de buena salud. Los perros que sufran reacciones alérgicas o afecciones en la piel
deben consumir alimentos específicos que reduzcan en lo posible estos síntomas.
Los expertos señalan que existen
razas de perros con mayor predisposición a desarrollar dermatitis atópica. En
general, los perros con pliegues en la piel y pelo corto tienen más problemas
de piel. En estos casos lo más recomendable es proporcionarles una alimentación
rica en omega y una higiene adecuada con productos específicos e
hipoalergénicos. La ingesta de agua también es importante para mantener
hidratada la piel del animal.