Tener una mascota aporta a los
dueños gran cantidad de beneficios y lleva consigo la adquisición de hábitos de
vida saludable. Las ventajas son numerosas también a nivel emocional puesto que
son un remedio infalible contra el estrés y una fuente inagotable de amor y
compañía.
Para algunos expertos, los
animales de compañía se constituyen como una medicina preventiva. Sacar a
diario a pasear al perro es una de las
mejores formas de realizar actividad física y mejorar la calidad de vida. Además,
la tranquilidad que aporta la mascota ayuda a bajar la presión arterial,
estabiliza el colesterol en la sangre y reduce la posibilidad de padecer
enfermedades cardiovasculares.
Los cuidados y atenciones que
requieren los animales reducen el tiempo de ocio sin actividad. Las mascotas
son una constante fuente de motivación para sus dueños, hacen que las personas
se sientan útiles e incrementan la autoestima a través de una estrecha relación
en la que ambas partes intercambian cariño y emociones.
Tener una mascota es una buena
forma de establecer contactos sociales positivos y entablar amistad con
personas que compartan el mismo interés por los animales.
Para los niños la convivencia con
mascotas ofrece gran cantidad de beneficios. A través de los animales los más
pequeños aprenden valores positivos como el respeto hacia la vida, la amistad y
la responsabilidad, y favorece la comunicación entre padres e hijos.